Cómo me gustaría hablar Moschino porque la colección de Jeremy Scott ha sido simplemente GENIAL. Más allá del revuelo que haya podido causar por la propia estética de la colección es más que eso, es mucho más.... es una oda y homenaje a la propia marca además de una actualización brutal de la misma pero sin renunciar a la esencia de la casa italiana.
El trabajo de Jeremy Scott en esta colección, para mi, es comparable al que realiza Karl Lagerfeld con Chanel temporada tras temporada. No se desfigura en ningún momento la esencia de la firma y hay piezas icónicas que se repiten a lo largo de los años...mmm ¿No resulta repetitivo y manido ver las mismas piezas temporada tras temporada? Al fin y al cabo estamos en una sociedad que exige novedad cada seis meses... Oh, nada más lejos de la realidad mis pequeños... esos objetos se convierten en iconos. Son lo mismo, pero no lo son. Enhorabuena Jeremy. (Hola de nuevo logomanía y cinturones horteras de Moschino. Os echaba tanto de menos!)
How I´d like to speak Moschino! Just because Jeremy Scott´s collection was absolutely GENIOUS. Apart from all the noise that this particular collection has caused on the media because of the strong images it had, it was more than that, so much more.... It was an ode, an homage to Moschino´s legacy as well as a crazy update of the italian brand.
Jeremy Scott´s work, to me, was comparable to Karl Lagerfeld´s work over Chanel season after season. The esence of the brand, the things that made it what it is are still there, in fact, there are some items, totems migth be a better way to say it, that are always there. But, wouldn´t we be sick of them at this point? I mean, we expect change every six months and yet the same items appear... Oh no, my dears. They´re the same but not quite the same. You did It Jeremy!! (Hello there logo-maniacs and Moschino´s tacky belts. I´ve missed you!!)
Moschino siempre ha sido provocación y exceso con un toque de horterísmo e ironía a raudales, lo que le causó a su fundador problemas con Chanel ya en los 90. Con la "ridiculización" de la iconografía de la firma francesa en los 80 con su bling bling, los cinturones con logo o el acolchado característico del 2.55 no solo se convirtieron en el epítome del lujo y la elegancia para Chanel, también eran justo lo contrario gracias a Franco Moschino.
"Si no puedes ser elegante se extravagante" (Franco Moschino)
Moschino has always meant excess, provocation, a bit of tackyness and lost of irony, which caused some troubles with Chanel back in the 90´s. He mocked Chanel´s totems in the eigthies: the bling bling, the huge logos on the belts (or on absolutely evertything for that matter) or the padding of the 2.55. Those were not only the epitome of luxury and class, they were the perfect example of the oppsite as well thanks to Franco Moschino.
"If one can´t be elegant at least be extravagant" (Franco Moschino)
Por si eso no fuera ya bastante, Jeremy Scott fue un paso más allá y no solo ironizó con la firma francesa y todo lo que representa, la cultura de consumismo también se llevó su parte. El concepto de Fast Fashion ha sido redefinido. Nunca dos opuestos se habían atraído más. La costura y el lujo representado por Chanel con la iconografía de McDonalds hace que la costura pase a ser fast fashion. Ready to Order.
Oh ironía...dulce ironía.
La cultura basura y de masas es el concepto que hay detrás de todo esto. La iconografía de McDonalds y la aparición de Katy Perry al final del desfile no son fortuitos son una crítica más y los crowd pleaser por excelencia a día de hoy. A esta estética pop se incorporan los elementos más comerciales de la cultura de consumo, como hizo Andy Warhol en los 60. Si Warhol hubiese hecho moda el resultado hubiese sido algo como ésto.
If that alone wasn´t enough Mister Scott added a little twist and not only he mocked Chanel and all that it symbolizes, but he also mocked consumery culture. Fast Fashion now has a new meaning. It seems that the opposites do attract each other, and they attract each other like hell I´d say! Couture and luxury of Chanel sartorial suits mixed with McDonalds iconography makes couture, fast fashion. Ready To Order.
Oh irony...sweet, sweet irony.
Junk and mass culture is behind all this. McDonalds inconography and Katy Perry working the runway weren´t lucky, it was all a critic about today´s society and massive crowd pleasers, which was kinda the point of this collection. The pop sensibility of the collection was full with the most commercial things about our culture, somehow like Warhol did in the sixties. If Warhol would have done fashion he would have done something like this.
La colección es tan genial que no me extraña que la fundas de móviles y los jerseys se hayan convertido en los objetos de deseo y todo el mundo quiera tenerlo.... Interesante desenlace para una colección que se ríe precisamente de ese consumismo....
Oh ironía, dulce ironía....
It´s so great that it´s no surpraise that the french fries phone cases and Moschino/McDonald´s sweaters are the new objets of desire and everyone want to have one.... Interesting since this collection makes fun exactly of that....
Oh irony... sweet, sweet irony.
Lots of love
Marina
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